Gol

Apareciste como aparecen las cosas cuando uno no las busca. Y me hiciste acordar como era eso de reír sin razón ni tristeza. Solo reír. Porque si. Porque por qué no. 
Me acomodaste el corazón cuando ya se había acostumbrado a la incomodidad, y resucitaste mi sonrisa más profunda, la más genuina, la que te sale desde el alma. 
Me gustas. Vos. Y todavía más nos gusto, los dos. Juntos.
Metiste un gol de media cancha al minuto y medio de juego, y me dejaste medio estúpida, medio dada vuelta en este  partido (ojalá) interminable.

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